“Ojalá querida Gloria Guevara” fue el mensaje que dejó en twitter Eduardo Chaillo, a la presidenta del WTTC y ésta le regresó el tweet con un “Ojalá, un abrazo”. Y es que, en medio de la desesperanza se tienen las palabras que se pueden, esta en particular se repite entre los empresarios turísticos.

El intercambio de saludos sucedió a partir del artículo que escribió para El Universal la CEO del Consejo Mundial de Viajes y Turismo. En el documento propone que se deben implementar apoyos al sector, de lo contrario están en riesgo 50 millones de empleos del turismo en el mundo; la maestra Guevara narra que, debido a la pandemia del coronavirus, cada día que pasa se pierden un millón de trabajos en el orbe. 

La interjección “ojalá” que emitieron tanto la ex secretaria de turismo federal como el experto en turismo de reuniones engloba la fe y al mismo tiempo desilusión de miles de empresarios de la industria de viajes que no ven apoyos o medidas desde el gobierno federal que les ayuden a paliar el fenómeno sanitario que están pasando.  

Ojalá es una palabra que describe un deseo que por el momento no es real, aunque no se descarta la posibilidad. Tiene su origen en una frase árabe que significa: Si Dios quisiera y se emplea para el futuro incierto. 

Será mañana cuando -suponen los turisteros- saldrá el presidente Andrés Manuel López Obrador a emitir una serie de medidas que ayuden a los más de 10 millones de mexicanos que viven del turismo. Al menos en el concierto global eso es lo que está sucediendo, pero de ahí el “ojalá” que escucho constantemente de la gente que se dedica a este oficio, porque en nuestro país como en “Big Brother” las reglas cambian.

De plano ¿no tienen los trabajadores y los empresarios otros mecanismos para convencer al presidente de la obvia necesidad de apoyar al sector? ¿nos vamos a quedar con el ojalá?

De todos los “ojalá” yo solo apoyo esa que dice Silvio Rodriguez: “Ojalá se te acabe la mirada constante, la palabra precisa, la sonrisa perfecta…”

@ElCastorOficial