Aunque fueron legendarios sus 59 títulos de Grand Slam, el mejor partido lo está dando al impulsar a las féminas; “siempre he luchado por causas liberales, por las minorías, por las mujeres” comenta la leyenda del tenis mundial durante su conferencia magistral en el cierre de la Cumbre del WTTC en Cancún.
Martina parece ruda por como le vimos desempeñarse en la cancha, pero es de gentiles maneras, cada que termina una idea, sonríe. Llegó emocionada a contarnos que le dio gusto visitar el caribe mexicano porque eso le permitió viajar, le encanta ir de un lado a otro y se sentía halagada de la invitación que saludó en varios idiomas, hasta en maya dijo: Ma´alob k´iin, que significa buenos días.
“Amen lo que hagan; cuando uno llega a la meta, si no amas lo que haces, no funciona” comenta como “subiendo a la red” de ideas, la tenista estadounidense de origen checoslovaco. Aunque la mejor “volea” surge cuando alza la voz: “es necesario crear más espacios para el empoderamiento de la mujer…las empresas podrían ser más rentables si tuvieran a más mujeres en puestos de poder”
No lo dice como “intentando un juego más abierto”; ella criticó y fue protagonista activa para que las tenistas ganaran igual que los varones, no les pagaban lo mismo, había una diferencia de diez contra uno en los sueldos, después de tanto insistir, se logró que en el 2007 los contratos fueran parejos.
En su manera de vivir siempre ha persistido la idea de evolucionar y atreverse a todo; lo mismo pilotea aviones que cocina o atiende a los animales en su granja:” ¡Arriésgate, haz ajustes, cambia! A los 30 años (empezó a los 14 años) después de ganar varios campeonatos, mi entrenador me puso a cambiar la manera de mover las piernas -se para de su lugar y muestra al público- eso me permitió ganar más, cansándome menos. La moraleja es que no les de miedo hacer cosas nuevas y evolucionar” comenta Martina.
Críticas y eventos negativos siempre habrá en la vida, para trascender hay que hacer oídos sordos: “Cuando declaré mi homosexualidad no fue bien recibida por los seguidores del Tenis, recuerdo que al entrar a la cancha para enfrentar a mi eterna oponente Chris Evert, la mayoría le aplaudía y cuando aparecía yo, arreciaban los abucheos, pero nunca me desanimó” contó Navratilova quien al final de sus carreras Evert ganaría 37 partidos, Navratilova 43.
Tras la conferencia magistral de Martina vino la Declaratoria de Cancún para apoyar a las mujeres del sector de viajes y turismo. En el documento se establecieron varios compromisos de los socios del WTTC para dar mayores oportunidades de empoderamiento a sus empleadas y lo mejor es que más de un centenar de empresas afiliadas ya firmaron para comprometerse a dar mayor capacitación a las mujeres e incrementar la presencia femenina en puestos directivos y mejorar salarios. Esta fue la mejor idea llevada a la acción.
@elcastorviajes.