“Hoy si me ponché” me dice una querida amiga; no fue la única, ayer entrevisté -vía telefónica- a más de cinco protagonistas del turismo para el programa Check In de México Travel Channel y la mayoría se sentía inmovilizado ante el informe del presidente López Obrador. 

¡Acéptalo! Eso dice mi terapeuta. ¿a AMLO? No…tienes que aceptar que tienes miedo a la incertidumbre, para así dejar de temer y echarte a andar. En estos momentos hacen falta alternativas desde la iniciativa privada para ir construyendo un nuevo modelo turístico.

No es fácil; “En un escenario en el que se cancele el 75 por ciento de los viajes domésticos y el 80 por ciento de los que tienen destino a México, la reducción del consumo turístico interior y receptivo sería de 239.2 mil millones de pesos” según Cicotur .

Desde la óptica política no les permite visualizar que estamos en la peor crisis para el turismo desde la Segunda Guerra Mundial, porque eso significaría cambiar proyectos personales por un Plan Emergente de Nación donde participaría el gobierno, la iniciativa privada y la sociedad, pero que crees, eso no está en la libreta de apuntes presidencial.

Si intentáramos cambiar la percepción del presidente López Obrador sobre el turismo nacional, tendría que saber que:“el 93 por ciento de las empresas turísticas -unas 450 mil unidades- son microempresas con menos de 10 empleados” acorde a datos extraídos del documento del Centro de Investigación y Competitividad Turística Anáhuac. 

Aceptemos; el presidente se mantendrá en sus dichos, toca ahora a ese casi medio millón de microempresas iniciar una cruzada, inventando vías alternas para sacar adelante sus negocios, será una aventura cuesta arriba pero estoy seguro que serán imparables porque su éxito será recordado como el día en que el coronavirus los hizo naufragar y sin la ayuda de su gobierno llegaron a buen puerto. 

@ElCastorOficial